Salud y SOLIDARIDAD para el 2.010

Ayer, a través de las ondas de Radio Arnedo, coincidía con nuestro Secretario General en desear a todos los oyentes "salud" para este recien extrenado año 2.010.

De forma generalizada nos parece que si se quiebra nuestra salud podemos ayudar poco. Algo que no es del todo cierto, porque desde la enfermedad y la fragilidad, desde la serenidad que a veces impone esa situación, se pueden dar grandes ejemplos y dictar brillantes lecciones.

En cualquier caso es un deseo compartido y se admite que es la base para poder trabajar y obtener aquellos objetivos, materiales y/o espirituales, a que aspiramos.

Añadí en ese momento, y remarco aquí ahora, que al año que acaba de comenzar hay que pedirle, además SOLIDARIDAD.

Solidaridad con los que más necesitan de la intervención y el apoyo del Estado. De la intervención y el apoyo de las Comunidades. De la intervención y el apoyo de los Ayuntamientos.

Habíamos hablado de la decisión del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de no abandonar a ningún ciudadano a su suerte, a su mala suerte.

Creo que muchos de nostros hemos hablado ultimamente de la gente que te encuentras en la calle, en los bares, en las escapadas de fin de semana, para a continuación preguntarnos ¿dónde está la crisis?.

La crisis, esta crisis económica que ha afectado al primer mundo (tendríamos que hablar con frecuencia de la crisis humana que afecta al segundo y en mayor medida al tercer mundo) está precisamente en todos los que faltan. En los millones de ciudadanos que en todo el mundo han perdido su empleo, en muchos casos sus ahorros, y que sobreviven porque afortunadamente hay gobiernos sensibles que lejos de recortar derechos y ayudas, los mantienen y refuerzan.

(Por cierto algunos como Javier Merino, presidente de Nuevas Generaciones del P.P., está en contra de esto. Ya hablaremos otro rato. Seguramente en la línea de sus compañeros "cachorros" de Valladolid que no tienen ningún problema en abogar por la desaparición del salario mínimo. Cierro paréntesis).

Decía que al año que acaba de comenzar había que pedirle SOLIDARIDAD. La solidaridad de aquellos a los que, afortunadamente, no ha afectado directamente la quiebra parcial de modelo económico diseñado por la derecha, y alimentado por todos pensando que el futuro, nuestro futuro, estaba en otras claves distintas a las de siempre : trabajo, sacrificio y entrega.

La economía real está donde ha estado siempre. Empresa y trabajo; empresarios y trabajadores. Hay que restituir con fuerza estas bases. Hay que restituir estos valores, y hay que hacerlo en clave de IGUALDAD.

Si aquellos que siempre soportamos las crisis, que siempre hacemos el ejercicio de solidaridad, no somos capaces de aguantar el envite durante el tiempo necesario, esa "clave de IGUALDAD" se romperá por donde siempre suele.

Si les falta el apoyo que ahora necesitan, la desesperación de los parados puede traducirse en la aceptación de reglas de juego impuestas desde una sola parte.

Si asumimos que hay sectores como la construcción que no recuperará nunca sus niveles de antes de la crisis; si sabemos que hay sectores donde no hay cabida para más y por tanto la bajada de impuestos predicada por el P.P. no surtiría efecto; y si todos los paises admiten que los provocado por la crisis no se arreglará en el momento de la recuperación, nos queda hacer un ejercicio de solidaridad, pensando en quienes ahora nos necesitan y en lo que nosotros podemos necesitar.

Bueno será, por tanto, que el 2.010 nos ayude en la faena.