Esta mañana con un buen aficionado taurino.
¿Pero cuando nos van a dar las perdidas de las novilladas?, me interroga.
Ya se dió cuenta de las perdidas de más de veinte millones de las antiguas pesetas, respondo.
No. Novillada a novillada y diciéndonos cuanto nos cobran, porque a mi g, ente del torno me dice que se puede perder lo que se dice, me aclara.
Ciertamente que, como cualquier ciudadano, tendría derecho a una información amplia y clara. Más cuando ya son muchos años de perdidas muy cuantiosas, y nadie ha movido un dedo para cambiar la tendencia. Y eso que hablamos de perdidas directas, sin tener en cuenta las horas, dias y semanas que se dedican al asunto por parte del ejecutivo del P.P.
Esta es una cuestión que denunciamos en Pleno. El mismísimo alcalde admitió que efectivamente era una perdida importante. Practicamente responsabilizó de estas perdidas a la baja asistencia de aficionados, en lugar de actuar sobre uno de los dos factores que puede controlar. A saber, el precio de las entradas, y el gasto.
Sigo con el comentario de este amigo aficionado.
¿Acaso con la popular se perdía dinero?. ¿Acaso con Fernándo Jardón veíamos peores novillos y peores novilleros?.
Por referencias se que la popular ganaba dinero. Sobre las novilladas organizadas por el empresario Fernándo Jardón, la impresión es que había tan buenos novillos como ahora, y los novilleros que exigía el Ayuntamiento.
Hasta aquí la conversación.
A partir de aquí la reflexión.
Arnedo ha contado con una feria de novilladas de la máxima categoría siempre.
Si antes no se perdía, incluso se ganaba, y ahora llevamos años con unas perdidas inasumibles, algo ha cambiado.
Y si algo ha cambiado, algo tiene que cambiar. El alcalde lo sabe, y así lo ha reconocido publicamente. ¿Por qué no es valiente y cambia lo que tenga que cambiar?
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